Mi querido Lucrecio está confundido. Piensa que cambiando su figura puede conquistar* a las damas de la casa. Parece que no le cae muy bien esto de ser el único varón del hogar y seguir vegetando en la esquina patriarcal de la mesa, entonces optó por llamarnos la atención de esta atípica manera:
* En casa no practicamos la vegetofilia
Thursday, February 14, 2008
Hay en mí formas extrañas
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fotografía,
Miscelánea
Wednesday, February 06, 2008
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